miércoles, 16 de abril de 2014

Incluir para no reprimir, o reprimir para no distribuir


Con el aumento de la popularidad del discurso de la inseguridad, se apresuran a lanzarse candidatos a ofrecer una plataforma basada en la represión como solución a prácticamente todos los problemas de los argentinos. Es el reflujo de una sociedad cuyo sentido común sigue estado fuertemente ligado a los elementos que le incorporó el estado neoliberal, desde la dictadura en adelante, que el oasis ideológico de la última década no ha logrado aún derribar, pero que está claramente fragmentado. El debate de la inseguridad tomado por el todo, nos propone elegir entre dos modelos de gobierno; el de la represión, o el de la inclusión. Pero para reprimir a los pobres, tras una década de inclusión hace falta licencia social, una licencia que no cuesta demasiado conseguir, cuando se tiene la maquinita de producir emociones, o estereotipos que facilitarán la tarea de construir culpables.

lunes, 14 de abril de 2014

''Las políticas de represión sin inclusión social solo agravan el problema''

Entrevista a Sergio Brodsky, psicólogo de la UP3

En diálogo con DIARIOJUNIO, el psicólogo de la Unidad Penal Nº 3 de Concordia, habla desde su experiencia en el trabajo con los internos, acerca de las causas de la conducta antisocial; señala la falta de afecto desde la niñez como una de las principales, incluso más que la adicción a las drogas, a la que considera consecuencia de la anterior. Y afirma que la forma de solucionar el problema de los jóvenes que delinquen es “proponerles un proyecto de vida”. Cuenta la experiencia de 12 internos que armaron una cooperativa panificadora en 2006; “desde el año 2006-2007 han cumplido su condena y no han vuelto a reincidir”

martes, 8 de abril de 2014

Policía, fiscalía y Copnaf evitaron el linchamiento a un menor de 16 años

“Romerito” estaba internado pero se fugó: confirman que sufre adicciones

El hecho acaecido el pasado domingo por la tarde vuelve a poner el acento en varias instituciones y sus funcionarios; “Romerito” como identifican a este menor de 16 años con un abultado prontuario policial, está bajo la lupa del Estado desde hace varios años y la acción coordinada entre Copnaf, Poder Judicial y la Policía no han logrado evitar su pulsión al delito. Ahora bien, del otro lado del tablero, también hay jugadores: Ayer en diálogo con DIARIOJNIO el titular de Copnaf confirmó que el menor sufre de adicciones, lo que no es un dato menor, y lo relaciona directamente con otros casos registrados en la ciudad, (ver informe de DIARIOJUNIO sobre Marcos Aguirre “el hombre araña”). Rouger aclaró además que apenas sea aprehendido por la policía “Romerito” será trasladado a una comunidad terapéutica en Rosario. Será en otra provincia pues en Entre Ríos no hay centros gratuitos para atender estos casos bajo internación. Otra ficha que patea en contra de la inserción social del menor, se advierte con lo ocurrido el domingo. Los vecinos increparon al abogado de los Romero, Osvaldo Sarli, apenas éste se presentó en el lugar: ¿Cómo hace para estar al instante, como sabe que iban a robar? Se preguntó uno de los vecinos entrevistado por este diario. El año pasado el fiscal Germán Dri, afirmó que “el contexto social del muchacho es complicado, y no colabora positivamente con su inserción social”, mientras que los informes del Copnaf destacan un progreso durante los meses que estuvo bajo medidas tutelares. 

jueves, 3 de abril de 2014

Bárbaros, ignorantes o desinformados

La responsabilidad ciudadana en la ineficacia del sistema judicial


Por estos días tomamos conocimiento de casos donde muchedumbres enardecidas buscan hacer “justicia por mano propia” golpeando salvajemente a personas a las que suponen delincuentes. Han llegado incluso a causar la muerte de un joven, sin que ninguno se reconozca como asesino, en rigor lo son; son más delincuentes que el muchacho al que asesinaron, han cometido el delito más grave de todos. La justificación que intentan esbozar, es que lo han hecho porque el Estado no lo hace. Porque la justicia y la policía no hacen su trabajo. Eso puede ser en parte cierto, como en todos lados hay fiscales que investigan y otros que no, hay policías que cumplen sus funciones y otros que no, o que lo hacen a medias, y hasta hay de los que organizan saqueos. Y así como eso es cierto, no es menos cierto, que en este mismo momento, hay un fiscal que está investigando un delito muy grave, por los hechos que todos hemos sufrido el pasado mes de diciembre, que incluso hay policías que han declarado contra sus compañeros, y que la sociedad civil no a respondido a este deber como se lo esperaba. El fiscal reclama testigos, y pocos son los que se han presentado. Igual que ocurre con los acusados que se cansan de cometer delitos sin ser declarados reincidentes: ¿Sabrán los ciudadanos el grado de responsabilidad que tienen en ese caso, cuando prefieren no hacer la denuncia o no ir a declarar?